El pasado diciembre el Tribunal de Justicia de la Unión Europea dió un tirón de orejas al Tribunal Supremo español, en relación con las claúsulas suelo, estableciendo que cuando son nulas, lo son desde que se firmaron y el dinero debe devolverse desde entonces y no desde el 2013 como pretendía el alto tribunal español.
El decreto ley que aprobará mañana viernes el Gobierno sobre la devolución de las cláusulas suelo, para arreglar el entuerto, y al que ha tenido acceso Público no sanciona al banco si al final no devuelve el dinero cobrado de manera abusiva más sus intereses.
El borrador sobre el que trabajan PP, PSOE y Ciudadanos, como es costumbre, beneficia a los bancos y perjudica a los afectados.
El gobierno de Rajoy, ahora apoyado por el PSOE, está acostumbrado a cumplir los mandatos de la Unión Europea si benefician a los ricos y a incumplir los que les perjudiquen, como pasó con la sentencia del tribunal de Estrasburgo que acusaba a la legislación española sobre desahucios de ser favorable a la banca.
España, como en el franquismo, sigue siendo “diferente” y la justicia parece que también.