El CETA (Tratado de libre comercio e inversión entre la UE y Canadá) ha sido aprobado esta mañana en el parlamento europeo.
Este tratado, como el TTIP que se sigue negociando, refuerza el poder de las grandes corporaciones contra los estados, debilitando aún más la democracia ya que facilita que los poderes financieros pueden pedir compensaciones a los estados, fuera de la justicia ordinaria mediante “tribunales” privados, si entienden que alguna ley estatal atenta contra sus estimaciones de beneficios.
La izquierda europea y los verdes habían recogido 3,5 millones de firmas de ciudadanos europeos contra estos acuerdos, que se han fraguado con total falta de transparencia y gran influencia de las grandes corporaciones.
PSOE, PP y Ciudadanos deberían explicarnos cómo han votado a favor de un tratado que va contra la democracia y de los intereses de los españoles.
Por lo visto, el PSOE dice una cosa en España y vota otra en el parlamento europeo. ¿Así pretenden recobrar su credibilidad?