Puede que Europa gane, pero los europeos seguimos perdiendo. El Nobel de Economía 2008 Paul Krugman, escribe hoy en El País “acabamos de ver a Grecia levantarse contra una campaña de acoso e intimidación, un intento de meter miedo a los griegos no solo para que aceptaran las exigencias de los acreedores sino para que se deshicieran de su Gobierno. Ha sido un momento vergonzoso en la historia moderna de Europa y, de haber prosperado, habría sentado un feo precedente.”
El País le contesta duramente con un editorial “Política de altura” tratando de rebatirle con argumentos de los que suele usar Rajoy ¿Cómo se ha llegado a esto? ¿Cómo es posible que nuestro país haya sufrido en las últimas semanas una terrible campaña de intoxicación informativa por parte de todos los medios no digitales?.
La explicación es fácil. Los medios de papel soportan grandes deudas porque basaron sus ganancias en la publicidad y la crisis les afectó tanto que la solución ha sido endeudarse con los grandes bancos y fondos de inversión. Además, su gestión empresarial en busca de beneficios, han precarizado de tal manera a su personal que más del 80% tienen contratos basura. En esta situación, estos medios se ha convertido en los voceros de las mafias financieras que soportan sus deudas a cambio de tener asegurada la hegemonía de su discurso.
¿Y los derechos de los ciudadanos a una información de calidad? Las mafias financieras consideran que ya no hay ciudadanos, sólo clientes sin derechos. A esto hemos llegado. Los medios digitales soportan mejor la crisis porque sus gastos son muy inferiores y mucho más asumibles.
El NO griego es un gran paso para denunciar que la Unión Europea y el Banco Central Europeo son instituciones al servicio de las mafias financieras y que los ciudadanos no lo aceptamos. Tampoco deberíamos olvidar que, en los últimos 100 años, las dos veces anteriores que Alemania cogió el timón de Europa, Europa quedó destruida.