Tú no tienes ninguna culpa de que tus padres te pusieran el nombre de una piedra gorda. Además estaba muy de moda.
Tampoco del mito de la piedra gorda con Santiago y la Virgen. Los mitos suelen ser falsos, este lo es, entre otras cosas, porque Santiago no es un personaje histórico (la Virgen tampoco) y, en todo caso, no pudo venir a España porque, según los documentos religiosos, fue el primer apóstol en morir. Hay quien dice que en Santiago de Compostela está enterrado un hereje.
Pero los mitos, aunque sean falsos, si perduran es porque intereses poderosos sacan provecho de ellos.
Así, hoy celebramos este día de la piedra, Santiago y la Virgen como fiesta nacional, y por eso el ejército saldrá a la calle a que lo aplauda «la gente bien», es decir, los fachas y si no hace mucho viento, la bandera bajará del cielo, como corresponde a un ejército y una nación que sigue manteniendo rasgos del nacionalcatolicismo de la dictadura.
Que el día de la Fiesta Nacional, el acto más importante de cara a la población sea un desfile militar, queda raro en una democracia, pero parece que hay “razones” históricas o quizá mejor dicho, tradición.
Los Austrias y los Borbones absolutistas, siempre se apoyaron en el ejército y la Iglesia y, el Borbón actual, que se supone “constitucional”, sigue siendo el Jefe Supremo de las Fuerzas Armadas. Que en una democracia dirija el ejército el único personaje que no ha sido elegido por votación, muestra la apariencia de que los que mandan son demócratas pero poco y que la sombra de la dictadura es muy alargada.
En fin, tengamos la fiesta en paz. Aunque “la virgen del Pilar dice, no quiere ser francesa, que quiere ser capitana de la tropa aragonesa” (con música es más fácil de tragar).