El Papa le dice a los jóvenes “Necesitamos luz para afrontar tantas oscuridades” y los españoles le cantan el “Cara al sol”. Quizá alguno le recitó “Que te vote txapote”, sin saber bien que decía y creyendo que a los Papas les votan cada cuatro años, porque este slogan se ha oído estos días en Lisboa.
El Obispo de Santander (en el Diario Montañés) nos dice que no tengamos miedo a la Inteligencia Artificial, quizá ya esté pensando en utilizarla para mejorar sus formas de explicar lo inexistente con tecnologías más modernas.
Durante siglos, la Iglesia-Inquisición persiguió a la Ciencia y a la inteligencia humana. Hace cinco siglos obligó a Galileo, bajo pena de muerte, a desmentir que la tierra se mueve. Hace siglo y medio tachó de falsario a Marcelino Sanz de Sautuola porque las pinturas de Altamira tenían que ser falsas ya que, según un obispo inglés, la tierra sólo tenía 6.000 años. Afortunadamente no las hicieron borrar. Ahora se suma a la propaganda de una inteligencia artificial que es muy artificial pero poco inteligente. Ya no saben en qué dar para llamar la atención y sentirse modernos.
Cada vez es más difícil “creer lo que no vimos”.