PP y VOX, si fueran decentes, tendrían que reconocer que fueron protagonistas de los recortes y privatizaciones sanitarias que han dejado el sistema público de salud tan débil que tiene muchas dificultades para resolver pandemias.
En aquel tiempo, gran parte de VOX estaba chupando mamandurrias en el PP de la Madre de Todas las Ranas, y por eso son parte del problema. Por eso siguen pregonando que tenemos el mejor sistema sanitario del mundo, para ocultar que ellos lo destrozaron.
Si fueran decentes, asumirían su responsabilidad y colaborarían con el gobierno para solucionar el problema de salud de muchos españoles. Sobre todo de los más desfavorecidos, de los que no han podido huir porque no tienen chalet en Marbella.
Son liberales del s. XIX, como los que defendían la democracia de los propietarios y no quieren reconocer que nuestra Constución dice que la nuestra es una Democracia social, y son tan constitucionalistas que desconocen este artículo de la Constitución y hacen propuestas en el Congreso que no pueden ser aceptadas por inconstitucionales. Su único interés es derribar al gobierno y bajar los impuestos a los ricos, que para eso les donan -VOX debe ser el único partido con superávit-.
Son mentirosos y golpistas, como siempre ha sido la derecha, porque siguen con su mentalidad caciquil, creen que todo es suyo y no pueden aceptar la derrota en las urnas.
Hoy Ignacio Escolar en Diario.es les pone en su sitio, con pelos y señales, pero la caverna mediática, tan mentirosa y golpista como ellos -los dos son producto de las mafias financieras-, les seguirá dando la razón y esto continuará así mientras las intoxicaciones de políticos y medios de información-propaganda no sean delito.
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