“Desgraciados los tiempos en que hay que luchar por lo que es evidente” dice google que es de Dürrenmatt aunque yo lo había visto atribuido a Lukács. Quizá sea de los dos.
Lo que es evidente es que a un sistema político corrupto le corresponde una Justicia corrupta. La única frase sensata que he leído de Esperanza Aguirre es “la corrupción es intrínseca al sistema”. Había una justicia corrupta con Franco que ha seguido con la democracia porque no hubo ninguna depuración del sistema.
Pero la “santa transición” lo ha fomentado porque el poder Legislativo y el poder Ejecutivo han maniatado al Judicial con los Presupuestos Generales del Estado. En estos momentos, en relación con la población, hay una cantidad de jueces mucho menor que en cualquier otro país europeo de los desarrollados, por eso está todo el personal de los juzgados sobrepasado y las investigaciones judiciales son tan lentas que muchos hechos delictivos prescriben. Su sistema informático está obsoleto. Sus instalaciones lo mismo, en algunos juzgados se han inundado sus archivos por las lluvias. Un sistema político-económico corrupto no podría sobrevivir con una Justicia que cumpla su función.
No hay que olvidar que Gallardón hizo su aportación al caos poniendo límites al tiempo de instrucción de las causas. Todo juega en contra de la Justicia y siempre a favor de los mismos.
El bipartidismo ha sido nefasto porque ha ido minando el sistema democrático. Los destrozos de Gil y Gil en Marbella y alrededores no habrían sido posibles sin la complicidad de la eterna Junta de Andalucía. El PSOE no ha llegado a los niveles de corrupción del PP, pero también tiene lo suyo.
El Régimen del 78 está agotado y como no se renueve vamos jodidos. Estos tiempos son interesantes porque al fin se están poniendo en cuestión muchas cosas que se debieron cuestionar mucho antes.
Vienen citas electorales que se tendrán que dilucidar con la tramposa Ley Electoral de UCD, que ha mantenido el bipartidismo. Esto es un problema, pero veremos si somos capaces de resolverlo.
Y no quiero hablar de la momia porque hay asuntos más importantes que tratar.