Me gustan las elecciones. Lo que no me gusta son las campañas electorales y las campañas mediáticas encubiertas para apoyar a la derecha y al Capital.

Las elecciones, si son limpias, son una de las escasas posibilidades que tenemos los ciudadanos para manifestar nuestros deseos. ¿A quién le molestan? A los que prefieren acuerdos por arriba y, de ser posible, partido único. ¡Ya está bien de tomaduras de pelo!

No quiero que se pongan de acuerdo PP, PSOE y Ciudadanos que es lo que quiere la banca. Yo quiero una coalición de izquierdas en la que lo más a la derecha sea el PSOE. Si a Sánchez sus patrocinadores y sus abuelas no le dejan pactar una coalición de izquierdas a mi no me importa volver a votar.

También me gustaría que el nuevo gobierno hiciera una ley que garantizara nuestro derecho a una información de calidad, la regeneración democrática y que penalizara las campañas de intoxicación mediática.

Como dice el profesor Vicenç Navarro: Así de claro.