Me preocupa un mundo en el que los ricos escriben las reglas

Una persona inteligente es la que puede explicar de forma sencilla problemas esenciales. El nuevo premio Nobel (o similar) de Economía Angus Deaton ha explicado de esta manera tan clara uno de los problemas económicos más importantes: la desigualdad.

A partir de la constatación de que “los ricos escriben las reglas” ya uno tiene claro la dictadura de los mercados, la corrupción de los políticos “democráticos”, la teatralidad de unas elecciones que se realizan en un contexto de democracia moribunda acosada por tratados internacionales secretos, la inutilidad de parlamentos poco representativos y con escasas competencias, la independencia de una justicia que no suele encarcelar a los que escriben reglas injustas, etc.

El mundo es así, pero merece la pena cambiarlo cuanto antes.